sábado, 16 de febrero de 2008

LEGUA Y MEDIA

LA PRIMERA LEGUA Y MEDIA DEL CAMINO DEL DESTIERRO DEL CID CAMPEADOR.

Esta primera legua y media del Camino del Destierro va desde la población de Vivar hasta la Cuesta del Rey como queda reflejada en el Cantar de Mío Cid.
El Camino del Destierro se inicia en el sitio histórico de Vivar del Cid, lugar de nacimiento del personaje, en el llamado Molino del Cid, y pasa por el convento de Nuestra Señora del Espino, fundado por Pedro López Padilla y su esposa Isabel Pacheco Padilla en 1477, siendo construido con posterioridad a la iglesia parroquial de San Miguel. En el convento estuvo durante un tiempo el manuscrito original del Cantar.
Abandona la población de Vivar por el sur, cruza la carretera N-623 Burgos-Santander,
atraviesa el núcleo de Quintanilla Vivar para coger el camino de la Cuesta del Rey. Sotragero y el Ubierna siempre a su derecha. Prosigue por los términos de la Serna, Carroburgos y Cuesta del Rey. En el cruce con la Carretera de Sotragero, se plantea un recorrido complementario que permite visitar el Monasterio de Fresdelval a la izquierda o Sotragero a la derecha. Y subimos la Cuesta del Rey desde donde hay un mirador para contemplar el extenso Valle del Ubierna, que se extiende hacia el Norte y Oeste dominios controlados por el padre.
A la exida de Bivar hobieron la corneja diestra,

LA TRÉBEDE


La trébede aguantaba las ollas y los pucheros.



LA COCINA DE MI ABUELA

La trébede nos ofrecerá las recetas más características del pueblo. Empezamos por las morcillas.

MORCILLAS

La morcilla es un alimento básico de la gastronomía burgalesa. Después de hacer la matanza del cerdo en el que se ha cogido la sangre dándola vueltas para que no se coagule y lavadas las tripas, picada la manteca y la cebollas se hacen las morcillas en la caldera de cobre.
PROCESO de elaboración en sotragero.
Se pica la cebolla menuda, y la manteca, se mezcla con el arroz y con todos los demás ingredientes (sangre, sal, pimienta molida y pimentón), se remueve, para mezclarlo bien; a continuación, después de estar las tripas bien lavadas se rellenan con la mezcla teniendo en cuenta que se debe rellenar en un 50% debido a que el arroz aumenta de volumen. Se pone a hervir el agua, y cuando está hirviendo se introducen las morcillas con cuidado. La ebullición debe ser moderada a fuego lento, para que no se rompa la tripa. Se puede pinchar con una aguja de coser lana para que no exploten. Las tripas empleadas habitualmente son de cerdo, aunque también se realizan variedades con tripas de vaca o ternera que son mucho más estrechas.
Una vez cocidas al dente o pasaditas se sacan de la caldera y se colocan sobre papel para que sequen. También se pueden colgar. Sin meter en el congelador la morcilla puede estar un mes sin que se estropee. En el congelador se van sacando y saben como el primer día.
Este caldo que resulta de la cocción, se llama caldo mondongo o calducho.

De esta manera, la morcilla se puede comer «cruda» (puesto que ya está cocida), frita, asada o cocida.
Ingredientes:

Sangre, sal, pimienta blanca molida, pimentón dulce o picante según el gusto, cebolla de matanza, manteca de cerdo y arroz redondo.